333
El futuro de la caña
Fotografía cortesía de 333 Drinks.
Desde el miske y el gin de especialidad hasta la cerveza artesanal, la chicha y el pet nat; la gastronomía del Ecuador ha vivido una revolución respecto a cómo produce y consume bebidas de calidad. Cuando lo piensas, es una sorpresa que no haya habido hasta el momento un equivalente para el aguardiente de caña. Ahí es cuando entra 333 Drinks, un aguardiente premium creado por gente y para gente que ama la caña y el Ecuador.
Ecuador es un país que bebe y muchas veces bebe caña, una bebida que es parte de la identidad cultural pero ocasionalmente resulta un arma de doble filo, pues es un destilado con alto nivel alcohólico que raramente suele ser concebido como un producto de calidad, elevado y fácil de beber. “En Ecuador decimos que los diablos están metidos en el trago, por eso los sacamos a golpes del fondo de cada botella antes de beberla. Sacar los diablos, como decimos acá, nos libera de malas borracheras, chuchaqui, infidelidades, broncas y todo lo malo. Quisimos hacer la mejor caña y salió tan buena, que salieron corriendo algunos diablos”, comenta Josué Granda, dueño de 333. Al “sacarle los diablos a la caña”, el número del diablo deja de ser 666 y pasa a ser 333, he ahí el origen del nombre.
Si algo está haciendo Josué es cambiar la idea de la caña como un producto desprestigiado, al que se le tiene recelo, y más bien enaltecerla como una bebida elegante y disfrutable; mezclando una identidad de marca moderna y divertida con la cultura popular ecuatoriana. Nos enseña que la buena caña viene con los diablos sacados.
Fotografía cortesía de 333 Drinks.
El nombre de la marca también hace referencia al triple destilado que realizan para hacer esta caña, el cual genera una bebida suave, delicada, con notas a coco y vainilla. Las tres destilaciones eliminan la volatilidad del alcohol que normalmente se encuentra en el aguardiente de caña y causa el “fogonazo”, una sensación fuerte y poco placentera en el paladar y la garganta. Para prepararla utilizan caña de azúcar orgánica proveniente de la provincia de Azuay, en el sur del país, seleccionando muy cuidadosamente la materia prima. Posteriormente realizan un proceso totalmente natural, sin colorantes ni azúcar añadida, que resulta en una caña con 28 grados de alcohol. La bebida puede ser consumida sola, en hielo y en coctelería, realmente versátil.
Además, a base de esta caña neutra, 333 produce otros cuatro licores con distintos perfiles de sabor y algunos nombres un poco excéntricos. Éstos también pueden ser disfrutados individualmente o como sazonadores de cócteles.
Lágrimas de tu ex
Hecho con frutilla, arándanos, naranja y pimienta dulce, probablemente es el más balanceado y fácil de tomar de los cuatro. Se presta para tomar solo o en cócteles.
Mono arrecho
Representando a los sabores de la costa ecuatoriana, tiene orito, piña, hierba luisa y guayaba. Se sienten notas de banana caramelizada, azúcar morena, panela: un dulzor intenso. Un licor para tomar solo más que nada, con hielo o un poco de tónica.
Cañelazo
Inspirado en la clásica bebida ecuatoriana, tiene naranjilla, manzana, canela, clavo de olor y anís. Ligero, balanceando su acidez con las especias dulces, perfecto para beber solo.
Pipí de unicornio
El más complejo y curioso de los cuatro licores. Tiene piña, jalapeño, flor mariposa (la cual brinda el color) y limón. Lo que más se percibe es una piña madura y el sabor del jalapeño, con las notas de vainilla del licor original en el fondo. Requiere de un poco de hielo para beberlo solo y funciona excepcionalmente bien para realizar cócteles como un sour, revisa la receta aquí.
¿Dónde puedo encontrar 333?
Por el momento, puedes probar esta caña en la ciudad de Quito en Somos, Urko, Love Me Rooftop, Nativo y La Carnicería. Además, puedes comprar sus botellas directamente contactándote con 333 (hacen envíos a todo el Ecuador). El costo del aguardiente de caña es $15 y de los licores $22.
Fotografía cortesía de 333 Drinks.
Botella de 750 ml de aguardiente de caña 333
